Digame licenciada ¡LICENCIADA! Gracias! muchas gracias!
¡¡¡¡¡¡Aprobada con mención honorífica!!!!!!
Fue un maravilloso concierto, lo disfruté mucho, y todos los demás, los músicos que me acompañaron, los sinodales y el público lo disfrutaron también.
Es curioso, porque el programa que presenté es de puras obras de la primera mitad del siglo XX; una obra dodecafónica, otra atonal, otra sumamente cromática, la que era tonal con muchas disonancias, y la otra era modal, bitonal y con giros casi atonales. En resumen es un programa difícil de tocar y cantar, y también difícil de escuchar! pero a mi y al resto de los músicos que me acompañaron nos gusta mucho, y eso fue pienso yo el truco, si nos gusta a los músicos, le termina gustando al público.
Las canciones de la lírica japonesa de Stravinsky (1913), los otros tres exágonos de Chávez (1924), las canciones de Madagascar de Ravel (1926), las iluminaciones de Britten (1939) y los tres fragmentos sobre Hölderlin de Henze (1958).
Me fascinó el programa que seleccioné, pura música de cámara! ensambles muy complicados, música muy difícil, por fortuna tengo el honor de contar con músicos extraordinarios entre mis amigos.
En este concierto colaron todos, maestros, alumnos, exalumnos, mi compañero, todos compartieron conmigo el escenario y la satisfacción de haber ofrecido un gran concierto. Debo aquí también decir, que muchos de mis amigos pudieron asistir, a pesar de ser periodo vacacional, viernes a las 8:30 de la noche, estuvieron ahí la hora y media que duró todo, mis alumnos también fueron, mis papás! unos tíos y unos primos que viven aquí...
Qué más puedo decir? gracias! Gracias a todos!
Teresa... la que Canta!
Fue un maravilloso concierto, lo disfruté mucho, y todos los demás, los músicos que me acompañaron, los sinodales y el público lo disfrutaron también.
Es curioso, porque el programa que presenté es de puras obras de la primera mitad del siglo XX; una obra dodecafónica, otra atonal, otra sumamente cromática, la que era tonal con muchas disonancias, y la otra era modal, bitonal y con giros casi atonales. En resumen es un programa difícil de tocar y cantar, y también difícil de escuchar! pero a mi y al resto de los músicos que me acompañaron nos gusta mucho, y eso fue pienso yo el truco, si nos gusta a los músicos, le termina gustando al público.
Las canciones de la lírica japonesa de Stravinsky (1913), los otros tres exágonos de Chávez (1924), las canciones de Madagascar de Ravel (1926), las iluminaciones de Britten (1939) y los tres fragmentos sobre Hölderlin de Henze (1958).
Me fascinó el programa que seleccioné, pura música de cámara! ensambles muy complicados, música muy difícil, por fortuna tengo el honor de contar con músicos extraordinarios entre mis amigos.
En este concierto colaron todos, maestros, alumnos, exalumnos, mi compañero, todos compartieron conmigo el escenario y la satisfacción de haber ofrecido un gran concierto. Debo aquí también decir, que muchos de mis amigos pudieron asistir, a pesar de ser periodo vacacional, viernes a las 8:30 de la noche, estuvieron ahí la hora y media que duró todo, mis alumnos también fueron, mis papás! unos tíos y unos primos que viven aquí...
Qué más puedo decir? gracias! Gracias a todos!
Teresa... la que Canta!